Groupthink: Aniquilador de equipos

Groupthink: Aniquilador de equipos

La delgada línea entre el trabajo en equipo y el groupthink es tan fácil de inclinarse a un lado o hacia el otro. Dependerá de la forma cómo se lleve el desarrollo de un problema entre los miembros de un equipo.

Por: Ana Lucía Sifuentes el 07 Febrero 2018

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En la actualidad, es de conocimiento que en las empresas ya no se puede trabajar en forma individual como islas, debido a que se producen fallas en los procesos, o simplemente se demoran más de lo debido resultando un trabajo ineficiente en las organizaciones. Por lo cual, existe la tendencia de mejorar en este aspecto y fomentar el trabajo en equipo, buscando unir las áreas y que todos sean partícipes de la mejor decisión.

Cuando se dice comúnmente "aquí trabajamos en equipo", se suele pensar que es un grupo de personas que bajo diferentes puntos de vista y con un mismo objetivo llegan a un acuerdo y se toman decisiones, orientados con un liderazgo efectivo donde se aceptan las propuestas o se entrelazan de la mejor forma las ideas de un grupo para llegar a un objetivo en común. Sin embargo, muchas veces no sucede exactamente el "trabajo en equipo" sino una vaga lluvia de ideas o en el peor de lo casos un autoritarismo que no permite un abanico de propuestas para enfrentar un problema, lo que se muestra sobre la mesa en este caso es el groupthink.

¿Cómo detectar el groupthinking?

El groupthink se aprecia cuando el equipo solo se reúne sin tomar en cuenta las opiniones y se aceptan las preferencias del líder del equipo, siguiendo todos sus pensamientos, sus ideas y sus decisiones. Es decir no existen segundas ideas, segundas opiniones, dejando de lado lo racional o incluso lo moral por querer seguir manteniendo la unidad y no la objetividad del problema en cuestión.

Existe una falta de liderazgo que se confunde con solo mandar a los subordinados y subestimar los comentarios de los demás miembros, perdiendo tal vez valiosas opiniones que un verdadero líder debería admitir, ya sea por presión de querer mantener el puesto de trabajo, y no poder opinar sobre algo de lo que no estamos realmente en desacuerdo, o por una autocensura de nosotros mismos, u otras causas por las que no seríamos capaces de dar a conocer nuestros verdaderos puntos de vista.

Consecuencias y acciones 

Todo esto genera una consecuencia negativa tanto para el grupo como para la persona del grupo; para el grupo, porque deja de ser un grupo rico en información, con un debate objetivo de ideas, donde las personas puedan mostrar realmente sus ideas y escoger la mejor; y para la persona porque finalmente puede llegar a convertirse en un conflicto personal en caso se haya podido tratar un tema ético o simplemente una subestimación de su potencial profesional.

Es necesario que se difunda el concepto de groupthink y no se dé como tácito el concepto de trabajo en equipo, ya que se podrían estar perdiendo ahora mismo opiniones relevantes para una organización, o se podría estar generando un mal clima laboral en un ámbito donde deberían todos de estar alineados y remando todos en una misma dirección. Tal vez se podría incluir en las organizaciones donde exista la evaluación de desempeño un rubro donde indique si siente que su opinión es valorada para la toma de decisiones, lo que podría mejorar las formas de las reuniones y tener mejores resultados.

¿Puede el groupthink afectar el talento profesional de un empleado?