
El valor de una marca no se determina exclusivamente por sus ventas netas, su patrimonio u otros indicadores financieros. Se mide gracias una combinación entre estos junto a las emociones y experiencias de los consumidores, e inclusive con la forma cómo estos se proyectan con la marca. Un ejemplo clásico de esto son las valoraciones que realiza la consultora internacional Interbrand, que le atribuye a Coca-Cola un valor de US$ 78,423 millones.
Así, el brand equity nos permite conocer el valor actual que los consumidores le dan a una marca. También hablamos de brand equity cuando vemos que una marca puede generar más ventas futuras debido a su notoriedad. Sin esos reconocimientos por parte de los consumidores, las ventas actuales no serían tan grandes ni tampoco sus proyecciones. Desde esta perspectiva, el brand equity sirve como un indicador de ventas presente en el largo plazo.
Los principales factores que afectan al brand equity son:
Cabe señalar que capital de marca y valor de marca son conceptos diferentes. El capital de marca es un concepto subjetivo que se basa, como hemos visto, en las percepciones del consumidor. El valor de marca es un concepto financiero definido monetariamente.
¿Quieres saber más acerca del brand equity? Inscríbete en el curso Construcción y Gestión de Marcas del PEE de ESAN.
FUENTES CONSULTADAS:
Portal de negocios de ESAN Graduate School of Business. Desde el 2010 difunde contenido de libre acceso (artículos, infografías, podcast, videos y más) elaborado por los más destacados especialistas. Encuentra contenido en más de 15 áreas y sectores como Administración, B2B, Derecho Corporativo, Finanzas, Gestión de Proyectos, Gestión de Personas, Gestión Pública, Logística, Marketing, Minería, TI y más. ¡Conéctate con los expertos de ESAN y aumenta tu conocimiento en los negocios!
Lydia Arbaiza, decana de ESAN, destacó en Gestión que la orientación a resultados es la filosofía clave para que las empresas peruanas trasciendan la coyuntura y aseguren su sostenibilidad. Arbaiza soslayó que, siguiendo el ejemplo de gigantes como Alicorp o AJE, las organizaciones deben adoptar una cultura de ejecución y medición constante.
Carlos Aguirre, profesor de los Programas del área de Finanzas de ESAN, analizó en Gestión la delicada convivencia entre el Consejo de Familia (que vela por el legado) y el Directorio (enfocado en la estrategia y meritocracia) en las empresas familiares. Para mitigar estos conflictos, priorizó la importancia vital del Protocolo Familiar: un marco normativo que actúa como árbitro para garantizar que la armonía familiar no sacrifique la competitividad del negocio.
Jhonnatan Horna, profesor del área de Operaciones y Tecnologías de la Información de ESAN, precisó en Gestión que la adopción de la IA no es un desafío tecnológico, sino de gestión del cambio. El docente sostuvo que, para evitar que estas herramientas terminen abandonadas, los líderes deben priorizar la utilidad real sobre la novedad y crear un entorno seguro donde el equipo pueda experimentar sin miedo al error.