
El modelo usado por Costa Rica para hacer una recaudación exitosa de impuestos consiste en la utilización de un sistema basado en minería de datos. Es decir, a través de 132 bases de datos pueden realizar un perfil de sus contribuyentes.
El Ministerio de Hacienda de Costa Rica cuenta con distintas bases de datos, como colegios profesionales, bancos u otras entidades financieras y el mismo seguro social. A través de ellas, la dirección de Inteligencia Tributaria puede predecir cuáles empresas o personas naturales tienen altas posibilidades de evadir impuestos. Lo anterior se logra gracias a un análisis de comportamiento (transacciones, declaraciones tributarias, declaraciones de pérdidas, entre otras) del contribuyente.
En un mar de datos se desarrollan tecnologías que puedan detectar información y, mediante su análisis matemático, descubrir patrones y tendencias. Este conjunto de información cuantificada se utiliza para medir el riesgo y la probabilidad de los usuarios a cometer fraude tributario.
Según estadísticas publicadas por el Ministerio de Hacienda, se logró detectar, para el año 2016, hasta 945 519 casos de anomalías. Entre ellas se encuentran el incremento del patrimonio sin justificar, la declaración de renta cero o insuficiente, así como las declaraciones de pérdidas recurrentes.
El uso de datos para el análisis de conducta del contribuyente facilita las investigaciones tributarias, así como detecta los riesgos fiscales y alerta a las entidades regulatorias. Por ello, es de suma importancia desarrollar un ecosistema en conjunto con otras instituciones, de manera que este se enriquezca y pueda retroalimentarse a través de la adquisición de nuevos datos. Además, es fundamental garantizar la seguridad y el respeto a la sensibilidad de la información, contando con los agentes correctos para manejarla.
El uso de sistemas electrónicos que recopilan datos facilita la recaudación de impuestos al contar con información automatizada de redes autorizadas. Además, al establecer pautas se puede desmentir a aquellas personas que ocultan activos y ganancias, que pretenden cometer, bien sea a futuro, fraude fiscal.
La utilización del big data favorece la toma de decisiones de las entidades regulatorias. Su efectividad es un buen estímulo para evitar que las personas o empresas oculten información de manera consciente. El tratamiento masivo de la información conlleva a decisiones estratégicas y soluciones personalizadas que aprovechan el uso de los datos.
Fuentes:
La nación. "Hacienda intensifica uso de cruce de datos para combatir evasión".
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Jhonnatan Horna, profesor del área de Operaciones y Tecnologías de la Información de ESAN, precisó en Gestión que la adopción de la IA no es un desafío tecnológico, sino de gestión del cambio. El docente sostuvo que, para evitar que estas herramientas terminen abandonadas, los líderes deben priorizar la utilidad real sobre la novedad y crear un entorno seguro donde el equipo pueda experimentar sin miedo al error.
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