Desafíos de la educación superior

Desafíos de la educación superior

Jorge Talavera, rector de la Universidad ESAN, reflexiona sobre el replanteamiento que las universidades deben aplicar a su metodología dentro del actual mundo globalizado y tecnológico. Los detalles en este artículo para la revista América Economía.

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Hoy en día, las universidades enfrentan diversos desafíos directamente relacionados con su misión. El primero de ellos se enfoca en la formación de los profesionales que los países requieren para satisfacer la demanda de los sectores público y privado. El segundo se centra en la creación del nuevo conocimiento, aquel que supera el estado del arte en las diferentes disciplinas y contibuye a la resolución de los problemas actuales de las instituciones y la sociedad. El tercero consiste en la creación de nuevas tecnologías y el cuarto implica la transferencia y la aplicación de las mismas para el logro del bienestar general.

A fin de que las instituciones de educación superior respondan adecuadamente a estos desafíos, es necesario determinar las condiciones bajo las cuales deberán operar; entre ellas la estructura y la regulación de la educación en los diferentes países. En el caso peruano, todos los centros de enseñanza superior deben cumplir con la nueva Ley Universitaria y un riguroso proceso de licenciamiento, lo que representa un reto para quienes tenemos la responsabilidad de dirigirlos. Además de ello, las universidades pueden optar por procesos de acreditación internacionales.

Otros retos surgen de los avances tecnológicos, que suponen el cambio de posicionamiento de las instituciones y nuevas formas de hacer negocios, lo que ha afectado a todos los sectores, entre ellos el sector educación. Y el reto de la globalización que ocasiona una competencia sin fronteras.

Sin duda, la tecnología está transformando la educación. Las universidades pueden elegir como estrategia diseñar programas presenciales -en los que hay un contacto directo profesor-alumno, hacia los que está enfocada nuestra actual Ley Universitaria-, así como emplear modelos virtuales síncronos o asíncronos. En los primeros es posible la interacción profesor-alumno en tiempo real y en los segundos ésta ocurre de forma desfasada. Más recientemente se viene imponiendo el empleo de avatares educativos que refuerzan la itneracción alumno-estudiante en entornos 3D, adaptando la tecnología de los videojuegos y reforzando los procesos de aprendizaje.

Lee el artículo completo aquí.

Fuente: América Economía