
Para gestionar a los empleados de una organización, se necesitan habilidades y conocimientos orientados a velar por su productividad y rendimiento. Gracias a las competencias gerenciales es posible mejorar el trabajo de un equipo, liderar bajo condiciones satisfactorias y resolver los conflictos con éxito. Sin embargo, el primer paso para desarrollar esta gestión es conocer en qué estado se encuentra el capital humano en el Perú.
De acuerdo con un ranking elaborado por el Instituto para la Métrica y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington, el capital humano peruano está entre los más bajos frente a los países vecinos de la región. Este índice contempla 195 países desde 1990 hasta el 2016 y señala que, en 1990, el Perú estaba en el puesto 93 de 195 y, para el 2016, cayó hasta la posición 103.
No obstante, pese a que el capital humano ha descendido en posiciones, el estudio del ranking señala que el Perú ha mejorado en los cuatro factores que se consideran para esta medición. Estos son: estado de salud, logros educativos, aprendizaje y esperanza de vida. El capital humano ha mejorado en un 44 % en el lapso de estos 26 años. Aunque se ha registrado una cifra de crecimiento, es aún baja comparada con otros países.
La gestión de este aspecto depende de cómo una empresa y su plana gerencial trata y se relaciona con sus trabajadores, algo cada vez más relevante en el mercado laboral. Sin embargo, en el Perú las prácticas para lograrlo aún no son concretas y por ello no se registran las cifras deseadas. Por un lado, la capacitación sobre habilidades gerenciales es un pilar importante. En tanto, el Estado también debe otorgar plataformas de apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas, así como a las startups, con el objetivo de mejorar el talento en el personal.
Además, se trata de apostar por los empleados, brindarles la formalidad que necesitan, invertir en capacitaciones y generar una comunicación bidireccional y eficaz con ellos. Todo ello otorga un mayor bienestar, satisfacción y felicidad en el trabajador, lo cual es beneficioso para las compañías.
Según la firma SyC Soluciones Asertivas, los empleados felices son 300 % más innovadores y su productividad podría aumentar hasta en un 13 % como resultado de un estado emocional positivo. Pero el talento humano en el país aún no se encuentra satisfecho, pues de acuerdo con Ronald Career Services Group, el 70 % de los peruanos dejarían sus empleos ahora mismo por uno que los haga sentirse más felices.
El conocimiento sobre esta situación, las competencias necesarias para mejorarla y crear un entorno competitivo en las empresas son algunos de los objetivos principales que un gerente debe manejar. Para ello se necesitarán las herramientas adecuadas y los métodos necesarios para lograrlo.
También puedes leer:
Fuentes:
El Comercio. "Capital humano del Perú está entre los más bajos de la región".
IHME. "Unprecedented study finds nations failing to invest in education and health care at risk of slow economic growth".
PQS. "Perú todavía tiene una incipiente práctica de desarrollo del capital humano".
Diario Correo. "Más del 70% de peruanos dejaría su trabajo por uno que los haga más felices".
Gestión. "Los empleados felices son 300% más innovadores y 13% más productivos".
Portal de negocios de ESAN Graduate School of Business. Desde el 2010 difunde contenido de libre acceso (artículos, infografías, podcast, videos y más) elaborado por los más destacados especialistas. Encuentra contenido en más de 15 áreas y sectores como Administración, B2B, Derecho Corporativo, Finanzas, Gestión de Proyectos, Gestión de Personas, Gestión Pública, Logística, Marketing, Minería, TI y más. ¡Conéctate con los expertos de ESAN y aumenta tu conocimiento en los negocios!
Lydia Arbaiza, decana de ESAN, destacó en Gestión que la orientación a resultados es la filosofía clave para que las empresas peruanas trasciendan la coyuntura y aseguren su sostenibilidad. Arbaiza soslayó que, siguiendo el ejemplo de gigantes como Alicorp o AJE, las organizaciones deben adoptar una cultura de ejecución y medición constante.
Carlos Aguirre, profesor de los Programas del área de Finanzas de ESAN, analizó en Gestión la delicada convivencia entre el Consejo de Familia (que vela por el legado) y el Directorio (enfocado en la estrategia y meritocracia) en las empresas familiares. Para mitigar estos conflictos, priorizó la importancia vital del Protocolo Familiar: un marco normativo que actúa como árbitro para garantizar que la armonía familiar no sacrifique la competitividad del negocio.
Jhonnatan Horna, profesor del área de Operaciones y Tecnologías de la Información de ESAN, precisó en Gestión que la adopción de la IA no es un desafío tecnológico, sino de gestión del cambio. El docente sostuvo que, para evitar que estas herramientas terminen abandonadas, los líderes deben priorizar la utilidad real sobre la novedad y crear un entorno seguro donde el equipo pueda experimentar sin miedo al error.