El ADN emprendedor de las mujeres afloró con fuerza en los meses de pandemia. Así, han demostrado su virtud resiliente no solo para mantener sus negocios, sino también para mejorarlos.

Karen Montjoy, coordinadora de la Incubadora Innova ESAN, señala que en estos días de crisis las mujeres han mostrado mayor interés y realizado más consultas sobre estrategias para iniciar o hacer crecer un emprendimiento.

"Puedo decir desde mi experiencia en la incubadora Innova ESAN que las mujeres llegan con proyectos bien definidos a comparación de los hombres que llegan más dubitativos para consolidar un concepto de negocio. Además, noto que las mujeres investigan más y tiene una preparación mayor y objetivos claros. Quieren conocer sobre temas de tecnología como plataformas digitales para promocionar sus negocios, adquirir conocimientos en marketing digital, desarrollo de blog e involucrarse con comunidades similares a ellas", explica.

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Fuente: Gestión