Existe una significativa brecha de infraestructura en el país, lamentablemente en los últimos meses no tenemos algún viso por cerrar el gap. La brecha de infraestructura no sólo abarca transporte sino energía, educación y salud. Esta última generó unos resultados muy negativos durante la pandemia.

Durante el “Boom de Commodities” que tuvimos entre el 2006-2012, si bien pudimos crecer a dos dígitos con una baja inflación, no llegamos a realizar el cierre de brecha de salud que el país debió necesitar para enfrentar la Pandemia del 2020. En el Boom de Commodities pasado se pudo cerrar el déficit fiscal y llegamos a ahorrar casi 10% del PBI para el Fondo de Estabilización Fiscal (FEF). El dinero del FEF no fue suficiente para paliar los efectos adversos de la Pandemia, que fueron muy mayores en comparación con los pares de la región Latinoamericana.

Tenemos muchas brechas en diferentes aspectos del país, la brecha más trillada es la de transporte. Lo que preocupa es que no estamos aprovechando la coyuntura y la necesidad de fomentar la inversión con el fin de ayudar a cerrar esa brecha que tiene un efecto multiplicador en la economía, generando empleo, ingresos y bienestar en las poblaciones.

Los gobiernos de Toledo, García y Humala han tratado de cerrar las brechas. Una de las carreteras es la 30-D que une Palpa (ICA) a Llauta y Laramate (Ayacucho), que era trocha y que ha permitido unir la costa y una parte de Ayacucho. El turismo y la provisión de insumos se ha favorecido, con el consiguiente abaratamiento en el precio de los productos que llegan a poblaciones de menos de 1000 habitantes. Eso sí es inclusión, el alumbramiento ha llegado con la carretera y las oportunidades de negocio también.

Lo que aún sorprende es que muchas de las localidades que son unidas por la carretera de 100km, no tienen agua, en pleno siglo XXI. Lo contradictorio es que tienen energía, señales de internet y no llega el agua potable o gas a las casas. Infraestructura genera empleo, reduce pobreza y permite la inclusión de poblaciones alejadas del país. Lo que se requiere es una adecuada gestión de recursos por parte de gobiernos locales y regionales junto a una adecuada planificación estratégica por parte del gobierno central.

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