La Tecnología y la Educación Superior en época de crisis

La Tecnología y la Educación Superior en época de crisis

Eddy Morris, director del MBA y de la Maestría en Dirección de Tecnologías de la Información de ESAN, habla sobre cómo la educación superior debe replantearse desde la tecnología ante la crisis del Covid-19. Los detalles en el siguiente artículo para América Sistemas.

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La incorporación de las Tecnologías de Información en el aula universitaria, requiere una reinvención de la forma como realizamos la enseñanza y la adaptación de los docentes y del alumnado en el entendimiento de las formas en que la Tics pueden apoyar en el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Se debe implementar un diseño curricular centrado en el aprendizaje y basado en competencias, una de ellas en el uso de tecnologías de información, como alternativa para lograr los objetivos de formación y pertinencia en relación con los cambios en el entorno.

El uso de las tecnologías en la educación superior nos brinda beneficios como el trabajo colaborativo, la gestión del aula no solo es tarea del profesor, las nuevas plataformas tecnológicas integran a todos los actores involucrados para mejorar la experiencia del aprendizaje; se puede monitorear si se cumplen los objetivos de la clase, y los estudiantes pueden compartir sus inquietudes y llevar un seguimiento de sus calificaciones.

También nos permite optimizar el tiempo con el uso de software académico que nos permite tomar clases donde nos encontremos y nos ahorra tiempo de desplazamiento de estudiantes y profesores, definir mejor el dictado de cursos de acuerdo a una disponibilidad horaria.

Abanico de alternativas

Actualmente existen plataformas que permiten el manejo de la información del perfil de los alumnos, egresados, profesores, gestionar las mallas curriculares de planes de estudios, programas y syllabus de los cursos, facilitando el manejo para los procesos de acreditación y asegurando la coherencia con los objetivos definidos. Mejora la comunicación y gestión de docentes, ya que el software facilita el seguimiento de actividades de docentes respecto a sus clases, y otros aspectos como la investigación y la gestión académica. La reducción de costos es otro de los impactos, pues no usamos papel y otros elementos que en un ámbito presencial se utilizan.

Es importante considerar la analítica de datos para tomar decisiones y prever el comportamiento de alumnos y profesores, los software ya utilizan machine learning que pueden identificar de forma temprana el riesgo de deserción y apoyar a los estudiantes para que alcancen su meta. Con el análisis de datos se pueden entregar servicios de atención personalizada y orientada a las necesidades de cada integrante de la institución de educación superior.  Hoy en día ya se dispone de sistemas de gestión de aprendizaje learning management system o LMS que es un software para administrar, distribuir y controlar las actividades de formación no presencial y que permite trabajar en forma síncrona o asíncrona con los participantes.

Continuidad de las Operaciones

La comunicación asincrónica es aquella que permite la comunicación por Internet entre personas de forma no simultánea. En algunas universidades manejamos los cursos en forma sincrónica, en línea en tiempo real posterior a ello, las clases quedan grabadas en un LMS (Blackboard, Canvas, Moodle, entre otros).

En estos momentos de Coronavirus la educación virtual es una excelente alternativa para la continuidad de las operaciones de las instituciones superiores. La ventaja es que los estudiantes actuales son una generación que nació en la era de internet y son mucho más digitales que sus padres y profesores. Ante la imposibilidad de tener a los alumnos en forma presencial las tecnologías nos permiten aprovechar las ventajas de la educación virtual.  En las primeras semanas de cuarentena y aislamiento las universidades y otras instituciones de educación superior están recurriendo a la gestión de aulas virtuales usando plataformas de e-learning.

Se han generado disposiciones del gobierno como la del Ministerio de Educación Martin Benavides, quien busca "repensar la forma en como nos hemos venido educando y como pensamos" combinando medios digitales, televisión y radio para hacer llegar la educación a todo el Perú en al menos 10 lenguas originarias y de señas. En principio, esta iniciativa es muy positiva: que el Estado busque estrategias basadas en tecnología para poder cubrir la carencia educativa es una excelente señal. Esta crisis tomó completamente desprevenido al sistema tradicional.

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Fuente. América Economía