La nueva gestión regional ha tenido más de un contratiempo en la designación de quienes ocuparían los cargos de confianza, e incluso se habló de una paralización de la administración del Gobierno Regional. En entrevista con El Tiempo, el director de la Maestría en Gestión Pública de ESAN, César Fuentes, explicó que estos inconvenientes se pueden evitar si, cuando ingresa una nueva gestión, solo se renuevan los cargos más políticos.

En la Región hubo conflictos en la designación de funcionarios (retraso en nombramiento, renuncias, cambios de funcionarios). Una vez iniciada una gestión, ¿cuánto debería tardar el gobernador en tener listos sus cuadros?

Todo cambio de administración debería suponer la renovación de los cargos más políticos, como los gerentes generales, pero en el Perú tendemos a cambiar todo el escalafón. Siempre ocurre, cuando hay elección municipal y regional, que toda la inversión pública se queda parada. Más que poner una fecha de cuándo deberían estar listos [los cuadros], es que no deberían cambiar la parte administrativa, sino los cargos más políticos.

No es recomendable que haya demasiadas modificaciones en el personal...

Los municipios tienden a cambiar todos los cargos de gestión, no solo los de confianza. Entonces cada ciclo político es un bajón en la inversión pública. En Perú -no solo en Piura-, los alcaldes y gobernadores piensan que deben cambiar a todo el mundo: con el inicio de una nueva gestión, recién empiezan a aprender el tema de compras y contrataciones, y termina en que en el primer año se retrasan las obras públicas, que deberían tener continuidad.

Y la continuidad configura otro problema en la gestión pública.

Sí. Especialmente en municipios no hay planes maestros en los que una administración continúe lo que hizo la otra. No tenemos esa percepción de continuar las obras. La administración pública trasciende al gobierno de turno porque hay obras que continuar.

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Fuente: ATV+